Casa de piedra preciosa, ubicación ideal para explorar el Matarraña, comida casera con productos locales.

Realmente, la insonorización de las habitaciones necesita mejorar, se escuchaban ruidos molestos del exterior. Además, el acceso a la decoración del lugar podría resultar algo anticuado y poco atractivo para quienes buscan un ambiente moderno.

No se pierdan la deliciosa comida local en el restaurante. cada plato está preparado con ingredientes frescos y auténticos que realmente destacan los sabores de la región.

Una estancia inolvidable

Disfrutamos de dos noches maravillosas en un ambiente familiar. La atención de Kiku fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa. La comida del restaurante fue un verdadero placer, con sabores auténticos de la región. Recomiendo probar los platos locales y disfrutar del acogedor jardín.

hospitalidad que sorprende

La experiencia fue maravillosa. Kiku, el anfitrión, hizo que nos sintiéramos como en casa desde el primer momento. El ambiente del restaurante es acogedor, y la comida, deliciosa, con muchos sabores locales. Todo estaba impecablemente bien cuidado y la casa de piedra era impresionante.

Sin embargo, la insonorización del cuarto podría mejorarse. En algunas ocasiones, se escuchaba ruido desde el exterior que interrumpía un poco la tranquilidad de la estancia.

La hospitalidad de Kiku.

La limpieza impecable y el ambiente acogedor. La ubicación es ideal para explorar el Matarraña. Kiku es un anfitrión de primera, siempre atento a las necesidades de los huéspedes 😊✨.

Imposible encontrar algo.

La atención de Kiku fue excepcional, creando un ambiente cálido y familiar. La comida del restaurante es un deleite para el paladar, con sabores locales que encantan. Además, la ubicación permite explorar fácilmente el hermoso entorno de Cretas.

La insonorización en la habitación podría mejorar un poco, ya que algunos ruidos del exterior interrumpían la tranquilidad.

La estancia fue increíble, especialmente disfrutamos de la deliciosa comida casera en el restaurante y de la hermosa decoración en la íntima sala de estar. Además, hay espacios perfectos para relajarse, como el jardín y un rincón de lectura acogedor. Solo noté que podría haber más opciones de menú, pero no afectó mi experiencia. 😊

La hospitalidad de Kiku es impresionante. siempre disponible para ayudar. La comida en el restaurante es deliciosa, con platos caseros que destacan por los productos locales. La casa de piedra, amplia y acogedora, está perfectamente situada para explorar el Matarraña.

Ruidos exteriores

la estancia fue increíble, kiku es un anfitrión de 10, siempre al pendiente de nosotros. la comida del restaurante, brutal, con sabores locales q enamoran. la casa de piedra, hermosa y acogedora, puro estilo. además, el jardín es perfecto para relajarse y disfrutar. super recomendado para explorear cretas y el matarraña!

lo único es q la insonorización de la habitación podría mejorar y a veces había ruidos molestos del exterior.